Yo soy Max y como tú también soy un maestro pintor-hojalatero, te vengo a dar algunos consejos para reparar golpes, porque, como profesionales de la hojalatería, debemos darle el mejor servicio al cliente, esto quiere decir, dejar como nueva el área dañada al costo más conveniente.

Primero, debes tener en cuenta que los golpes con hendiduras redondeadas y suaves son los más fáciles de reparar, pero si estos son afilados o doblados te costará un poco más de trabajo.

• La manera fácil. Si la abolladura es muy pequeña, antes de usar una herramienta te recomiendo verter agua hirviendo en el golpe; esto puede funcionar porque el calor hace que tanto la pintura como el plástico se vuelvan flexibles, así que la abolladura puede relajarse y volver a su forma original. También para este tipo de casos puedes utilizar rellenador automotriz para asegurar que la pieza queda perfectamente definida.
• Uso de desatascador. El desatascador es una pequeña herramienta que sirve para agarrar la superficie abollada y al jalar hacia afuera para sacar el golpe del vehículo. Te recomiendo emplear esta herramienta si el golpe es grande, con este método es posible arreglar bien en la mayoría de los casos abolladuras grandes y planas. 
• Reparación más compleja. Ya si de plano no han servido las soluciones anteriores, es hora de emplear un poco más de esfuerzo. Para esto se necesitará desmontar la pieza que está golpeada, te puedes apoyar de una herramienta de desmontaje profesional, estas pequeñas palancas te ayudarán a soltar los remaches y clips. 

Ya que tienes la parte a reparar desmontada, calienta la abolladura desde el reverso (desde adentro) y ten cuidado de que no haya piezas de plástico. Hazlo a una distancia de unos 15 cm, de lo contrario la pintura podría quemarse. Ya con el golpe caliente comienza a dar golpes suaves con el martillo desde el borde hacia adentro, si llegar al borde es muy difícil, usa la barra redonda, cuya punta redondeada se coloca en la posición deseada. Estos golpes siempre se trabajan en círculo para tener mejores resultados.

*Los golpes suaves evitan daños derivados e innecesarios y conducen antes al resultado esperado.

Una vez haciendo esto procede a colocar la pieza en su lugar. Si consideras inevitable dañar la pintura del auto, ¡no te preocupes! Yo creo que es mejor reparar la abolladura sin preocuparse de la pintura que tratar de no dañarla y tardar más tiempo, por lo que prefiero al final dar un retoque de pintura, pues los resultados quedan mucho mejores.  

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